Diviertiendome sola :( [Libre] [Conejo vampirooo]

Evite una vez mas su mirada, y la lleve a otro lado.

-Era.... era...- no podia pronunciar su nombre - de tu madre.

Le diej finalmente dejando que los recuerdos me inundaran.

Deje caer el osito por abrazar a mi papa. Si quieres lo dejo en la cama... le dije, en tono triste.

-No... supongo que ella queria que lo conservaras- le dije, si Raissa habia dado su vida por esa niña un oso no seria nada.

Me baje de sus brazos y tome el osito. Mire mi manita, la mordida un estaba un poquito hinchada. Vamonos a la casa, papi. le pedi mirandolo desde abajo.

Observe como volvia a sostener el oso.

-Vamos- le dije y extendi mi mano para que la tomara.

Abrace mi osito con una mano y me aferre de la mano, o mas bien de los dedos de mi papa, Vamos... tengo hambre y sueño.. dije mirandolo aun.

¿Hambre? ¿Que comia? ¿sangre? ¿comida humana? No sabia que hacer.

-¿Que te gustaria comer?- le pregunte con un tono que pretendia ser amable, aunque no sabia si lo habia logrado y empezamos a caminar.

Conejitos ya no... dije sonriendo tiernamente. Y si vamos de caceria, pa? De seguro tu tambien tienes hambre...

Me encoji de hombros.

-Un poco- le respondi y seguimos caminando.

-¿Que te gustaria cazar?- le pregunte tratando de disimular mi ignorancia en todo lo referente a ella.

Pues conejitos ya no... le dije encogiendome de hombros. Que tal unos venaditos? le sugeri con una sonrisa dulce.

-Lo que tienes que hacer es matarlos y no dejarlos con vida para que no te muerdan- le dije con un intento de sonrisa, sentia que si sonreia mas mi cara se caeria a pedazos, hacia mucho que no sonreia.

-Ummm... ¿quieres correr?- no sabia que tan rapido corria.

Hice una mueca y antes de que el dijera algo mas sali corriendo bastante rapido, con una sonrisa en el rostro, riendome fuerte.

La niña se solto y empezo a corres, bastante rapido, mas de lo que imaginaba y reia fuerte. Su risa me recordaba a la de... la de su madre. Esboze una media sonrisa, sabia que ella hubiera querido.

Sali corriendo tras de ella.

Segui corriendo, escuchaba los pasos de mi papa atras mio. Apurate!! le grite entre risas, mientras abrazaba mi osito. No me alcanzas! lo rete

La seguia de cerca pero no la arrebasaba, parecia que se divertia y bueno... ahroa que estaba mas tranquilo me daba cuenta de que la habia hecho sufrir demasiado... por el desprecio y todo pero aunque aun no la aceptaba por completo ahora me daba cuenta de que no podia lastimarla, no era lo que Raissa hubiera querido.

-A que si- le dije y corri un poco mas rapido hasta correr a su lado.

A que no! insisti y segui corriendo mas y mas rapido, rebasandolo por unos centimetros.

Me rei un poco, se veia bastante feliz corriendo y la imagen que daba al cargar el oso que era casi de su tamaño era muy graciosa.

-Claro que no- le dije para seguir jugando con ella, sin pensarlo la tome entre mis brazos por la cintura y me tire sobre el cesped, aprisionandola suavemente entre mis brazos.

Solte una risita dulce mientras le daba un beso en la mejilla. Te quiero, papi! le dije, con una sonrisa dulce.

Su beso me saco un poco de mis casillas ¿habia sonreido? ¿no se me habia quebrado la cara? eso era algo, al parecer el tacto de la pequeña tenia un efecto raro en mi.

-Tambien yo- le conteste, dos segundos mas tarde me di cuenta de lo que le habia dicho, no era ninguna mentira, simplemente algo que no habia querido admitir por mucho tiempo.

Solte otra risita bastanta dulce y le di otro beso. Vamos a cazar?

Esboze una media sonrisa.

-¿Crees que puedas ocn un ciervo tu sola?- le pregunte un poco retador, tambien gustaba de los retos, no se a quien se pareceria [ironia]

Hasta crees que no, papa! me puse de pie de un salto y corri a buscar de comer. Alcance un ciervo y lod evore rapidamente.

Mi pecho se incho al ver que la pequeña derrotaba al ciervo ella sola ¿quer era? ¿orgullo? ¿que me pasaba? Todo era tan confuso en estos momentos, por por alguna extrañla razon me sentia muy comodo en su presencia.

-Eso es pequeña te pareces a...- tu padre... ¿iba decir tu padre?

A ti? le pregunte con una sonrisa, mientras me limpiaba los labios.

-Me has robado la palabra de los labios- dije aun sin creer que eso era lo que iba a decir. Sonrei sin pensarlo.

-Es mi turno- le dije y sali corriendo por otro ciervo, bebi limpiamente su sangre y regrese a su lado.